Este fin de semana Gemma, Pol, Eli, Anna y yo fuimos a escalar por Camarasa.
El ambiente de calor y bochorno hizo que me acordara del título de unas guías del Luichy tituladas “Roca Caliente en Los Pirineos” y decidí adaptar como título en entrada del post como Aire Caliente en Camarasa, aunque si hubiera puesto Aire Caliente en La Noguera no hubiera faltado a la verdad.
Salimos con tranquilidad y sin pausa, solo para repostar gasolina, desde el punto de encuentro hacia las 09.
La intención es ir hacia una de las zonas de sombra hasta que el sol nos echara y acabar el día en La Pera.
Llegamos al parking que entre vehículos de escaladores, de gente que viene ha hacer prácticas de rafting y de gente que solo viene a bañarse estaba no a petar pero casi.
Tras planificarlo un poco nos dirigimos a los Cingles de la Llum. Yo no había escalado en ese sector y me apetecía explorarlo un poco, además había leído unas entradas en varios blogs que lo recomendaba (una, otra), y si la idea era complementar el día escalando en La Pera, pues la teníamos al lado.
Aunque las condiciones atmosféricas no eran buenas: aire caliente y bochorno, el tacto se comportó y podías trabajar los agarres pequeñitos con un mínimo de garantías.
CINGLE DE LA LLUM.-
A la derecha de característica formación de La Pera, unos 100 metros, encontramos una placa de color claro, es el extremo izquierdo del cingle de la Llum y de ahí hacia la derecha.
Las líneas de ambos extremos son las que nos parecían más aptas para empezar a rodar, según reseñas, y había una cordada en ambos extremos. Nos dirigimos a las de la izquierda.
Según opiniones autorizadas su calidad es comparable con la otros sectores de Camarasa y ofrece un estilo de escalada muy variado: diedros, fisuras, placa, desplome, etc, con un equipamiento correcto (abundante según).
La graduación no es muy homogénea y en vías vecinas del mismo grado se pueden notar saltos en dicha apreciación.
El pie de vía es agradable.
En esta época del año -julio- de todo el paño que va desde El Cingle de la Llum a la Selva éste es que recibe primero al sol, a las 14 h ya está en el pie de vía y en algún tramo del paño de pared.
> Ambapara, 6a+.
Esta vía tiene toda dificultad concentrada en las tres primeras chapas. Solvento este tramo a la primera, que no está nada mal para calentar, y un fallo de percepción a media vía, cuando me encuentro con un tramo algo rebuscado, hace que me cuelgue cuando con un poco más de vista todo era escalar fácil y fluido hacia la R.
> L’Esperó del Tonet, 6a+ (Orientada de 6b).
Un poco decepcionado por el fallo en el anterior trazado afronto este nuevo con ganas de enmienda y con mejores sensaciones, pues ya escalo más activado.
Todo el trazado es bastante intrascendente de lo fácil que és, la lógica te hace subir por dónde es más fácil chapado siempre por tu izquierda hasta que llegas a una plancha vertical y los seguros te obligan a situarte debajo y atacarla por el centro.
Son dos chapas donde está toda la dificultad, agarres y apoyos pequeñitos (que al principio cuestan de ver) alternados con agarres algo más generosos.
Esta si sale a vista y me hace sentir contento.
Comparando este trazado con el previo y el que vino luego creo que es más 6a+ que 6b.
Con la amenaza de la llegada del sol ya cercana, pues ya empieza a tocar el pie de vía, pero con la pared aún a la sombra optó por escalar una última línea en este sector.
> ¡Per Tutatis!, 6b.
Este problema fue el mejor de los 3.
Unas chapas de trámite que tras una diagonal de derechas te dejan al inicio de un paño de pared vertical recorrido por un fisura.
Hay que escalar negociando tensa y severamente, sin descanso y durante unos cuantos metros, con la fisura y algún que otro agarre adicional hasta la penúltima plaqueta.
Problema muy mantenido y movimientos muy guapos.
LA PERA.-
Gemma y Eli apuran su vía (Rumba Catalana, 6c) y llega la hora de cambiar. Nos encaminamos a La Pera.
La Pera gozaba de buena salud escalatoril, pues había un nutrido grupo de amantes de la vertical. pero tuvimos que esperar un poco, no por ellos, pues es ese momento también es cuando entra el sol por la brecha e ilumina bastante líneas.
> No Em Toquis La Pera, 6a+.
La vía estaba prácticamente a la sombra, solo un fragmento iluminado por el sol.
En su día la encadené y me pareció bien eso del 6a.
Hoy la vuelvo a encadenar pero me tengo esforzar, creo que un poco en exceso, como para ser 6a+. El tramo técnico a medio camino me lo puso difícil y tras rebuscar y posicionarme conseguí encontrar una secuencia ganadora que se resolvió al principio con técnica y se remató la faena con un dinámico-tracción. Puede que el calor no ayudara.
Y llegando a la reunión hubo una chapa metida por dentro de una repisa que también que hizo esforzarme lo suyo; lo más lógico y cómodo hubiera sido ponerla por fuera, pero...
> Vidal-Murciano, 6b.
Línea de continuidad que ya tenía encadenada de una previa pero que vale la pena repetir.
Es muy mantenida. Hay que ser un poco valiente por suerte chapar dos de los 3 clavos no es hacer trampa, y el paso más puñetero es aquel en que has de empotrar el pie en la fisura pues no sabes si luego lo podrás sacar.
> Sushi de Xixi, 6b+.
El problema para acabar el día, aún no teniendo desperdicio y que se escala poco (según el 8a.nu alguien lo ha escalado) o nada recientemente, pues no hay ni rastro de magnesio, tiene varios inconvenientes.
El primero es que por su ubicación, pie de vía en pendiente con firme inestable y hacia un precipicio, y por paso de bloque de su entrada el asegurador tiene que estar anclado y, de paso, conviene que el escalador salga con la segunda plaqueta, mejor que solo la primera, ya chapada previamente. El asegurador se ha de anclar en un árbol, que queda muy arriba, por medio de una cinta, o varias, muy larga o atándole un cabo de la cuerda y luego anclandose a él.
Lo de la con la segunda plaqueta chapada es que si solo de pasa la primera depende de donde esté el asegurador la cuerda quedará encima del cuerpo del escalador y le estorbará, se le meterá entre las piernas, le quedará por encima,...., en fin que será un poco engorroso.
La vida vegetal que observamos en la pared apenas interfiere en el desarrollo de la escalada.
Hay alejes y son bastante asumibles, sólo hay uno que se puede decir que sea cabrón, pues te obliga a moverte fino antes de poder chapar.
Los dos últimos seguros está muy esquinados hacia al izquierda de por donde la lógica de los agarres y los movimientos te llevan.
Aunque en las reseñas de Lleida Climbs el problema es paralelo con la Second Life y solo comparten R, en realidad, aunque con seguros independientes, ambas comparten los agarres de llegada a la reunión.
A pesar de todas estos detalles, y ya sobre aviso, es un problema recomendable. La entrada es un pequeño bloque que si se observan bien los agarres se resuelve fácil pero apretando. Luego conti mantenida hasta la última chapa. y un paso cabrón, puede que de una dificultad similar a la entrada, para lograr chapar la R.
Yo ese paso, a pesar de haber encadenado Second Life en su día, no lo puede hacer, Eli me comentó que había que quedarse en equilibrio de un romo pero no lo supe encontrar.
Ésta fue la última del día.
Otras líneas que se escalaron fueron: He Vendido a mi Novia, cotada de 6c+/7a. Dificultad que a Eli le pareció desajustada pues le diñó l aimpresión de ser cercana al 7b, y la clásica reconvertida en deportiva Bielo-Reynal, un 6a de divertidos alejes y alojamientos en la fisura.
Paramos en Camarasa ha hacer una clara y aproveché para comprar un brazo de gitano y unas magdalenas.
A pesar del calor el brazo de gitano llegó a casa en buen estado. Lo venden congelado así que era de esperar que sobreviviera al viaje de vuelta.