En esta excursión me acercaré a conocer la zona de la Ribera Salada, en el término municipal de Lladurs y Odèn pasando por diferentes términos rurales como Timoneda y Montpol y con una gran variedad de paisajes.
Aunque en la guía la marqué como una ruta de 4x4 y de BTT la carretera está completamente asfaltada. Y si en algún momento he circulado por un tramo de pista ha sido por opción personal mía.
Salgo de nuevo desde Sant Llorenys de Morunys y circulo dirección a Port del Comte (Punto verde del mapa adjunto). Al llegar al Coll de Jou tomo el desvío dirección Solsona, por la LV-4241.
Fenerals, l’Hostal Nou de Canalda, Clotada d’Ancies, Hostal del Vent, Cap d’Estaques,... Y disfruto del paisaje.
Tras pasar el Hostal del Cap del Pla y el km 13 giró a la derecha a la altura de La Salada (indicador de la Salada y Timoneda) y circulo por el llano y zona de cultivos del Cap del Pla. A mi derecha queda La Salada y enfrente la Casanova de La Salada.
Ambas casas están integradas en el complejo agroturístico de la Salada, el cual está formado por 4 residencias independientes: La Salada (Edificada en el año 1800 y recientemente restaurada), Casanova de la Salada (Fue edificada en 1.854 y rehabilitada recientemente), el Cobert de La Casanova (Construida en 1.854, rehabilitada y acondicionada conservando su estructura de piedra y madera) y el Cap del Pla de La Salada (Edificado el 1763. Actualmente comparte edificio con un restaurante típico de la zona, pero cuenta con una entrada independiente y un espacio exterior privado).
Tras dejar atrás Casanova de la Salada llego a un cruce de pistas. Hay que seguir la de la izquierda, hacia Timoneda y en ligera subida atravesando la Serra de la Móra por medio de un bosquecillo de pino rojo y robles.
Seguimos por la pista principal y llegamos a la casa de Ferriol. También se conoce como Ferriols o Farriols. Es una masía en ruinas que pertenece al pueblo de Timoneda.
Tras circular por entremedio de otra arboleda que nos adentra en el Serrat de Sarri se llega a un cruce de pistas. La pista de la izquierda se dirige a la casa de Sarri, hemos de circular por la de al derecha y lleva directo a Santa Eulàlia de Timoneda, en la Serra de la Móra.
La planta de tomillo (farigola) es conocida también como timó, en catalán. Así, Timoneda, “lugar donde hay gran cantidad de plantas de timó”. Nombre documentado en el año 1.033 y que procede del latín popular. En la antigüedad también se la denominaba como vila d’Arcell.
Panorámicas de la Serra de Campelles, con Paret d'Odèn, a la izquierda, la pequeña Paret del Riu Lacó en el centro y el Puig Sobirà y la Roca de Canalda a la derecha.
La iglesia de Santa Eulàlia de Timoneda es una edificio de origen románico. El lugar ya es mencionado en el acta de consagración de la Seu d'Urgell (presuntamente elaborado en 839, a pesar de que se sabe que en realidad fue bastante superior, hacia el siglo X).
Fue donada en el 1.131 por el obispo de Urgel a la iglesia de Solsona. Desde inicios del siglo XX, y a causa del despoblamiento, tiene agregada a la de Terrassola.
El templo ha perdido buena parte de su fisonomía románica con todas las reformas que se han producido a lo largo de los siglos. Está formada por una sola nave, cubierta con vuelta de cañón, a la que se le han añadido varias estructuras a ambos lados. En el costado sur se construyó una capilla lateral, en el norte otra capilla y la sacristía y a ponente la vicaría.
En el muro sur encontramos una puerta de entrada, que fue modificada en el siglo XVII. Recientemente se ha construido una nueva puerta, situada en la capilla sur.
El edificio presenta un notable campanario de torre de planta cuadrangular de estilo románico que presenta tres niveles de aperturas -el campanario se estrecha progresivamente a cada nivel- y cubierta de cuatro vertientes.
En el primer piso se abre una ventana de medio punto en cada uno de los muros encima de las cuales hay dos pequeñas ventanas.
En el segundo nivel hay una ventana geminada en cada fachada, dos de las cuales han sido reconstruidas, pues fueron cegadas. Su capitel está decorado con motivos geométricos.
El tercer piso fue añadido posteriormente y sirve para alojar las campanas.
Todo el conjunto fue restaurado en 1993.
El campanario tenía en las iglesias románicas, una función simbólica, más allá de la utilitaria, que habitualmente consistía al ejercer como lugar de vigilancia ; representaba a la vez el eje ascensional que se dirige a Dios, y por su estructura robusta y compacta, confería seguridad y fortaleza a los creyentes.
También destaca su cementerio adjunto construido de una forma verdaderamente especial (característico de muchas parroquias de esta comarca) donde cada capillita es propiedad de una familia.
Se continúa circulando por la pista principal y en ligera subida.
Al llegar a la altura de la casa del Vilà el paisaje deja atrás el bosque y se humaniza: casas diseminadas y campos de cultivo combinados con bosques de pino.
Llegamos a un cruce más importante que el resto. Por la izquierda llega una carretera (LV-4011) que procede de Solsona por l’Hostal de Cirera y que se dirige a Cambrils del Pirineu.
Giro a la derecha y circulo por esa carretera dejando a la derecha las casas del Clop i Tàpia.
Se llega a otro desvío. A la izquierda y paralelo al río Ribera Salada la carretera se dirige a la urbanización del Pla dels Roures para luego llegar a la C-26 a la altura del Pont de Querol. A la derecha nos conduce al Pont del Clop.
Y enfrente, al otro lado del río, las ruinas de Cal Reig y Cal Sastre.
Giro hacia la izquierda y cuando estoy a la altura del río Ribera Salada hago una pequeña parada.
La ribera Salada es un afluente por la izquierda del Segre. tiene unos 40 km (56,5 si se suma el río Fred) y en su trayecto atraviesa los municipios de Odèn, Lladurs y Castellar de la Ribera. El río recibe su nombre a partir de Aigüesjuntes, donde se unen el Fred y el Canalda, para formar la Ribera Salada.. Desde aquí toma la dirección sur para entrar inmediatamente en la Garganta del Clop, pasando bajo el Puente del Clop y continuando hacia el sur hasta el término municipal de Castellar de la Ribera, por el Pla dels Roures.
Recibe su nombre porque una de las corrientes que lo originan, concretamente el Río Fred, nace de varias fuentes en unos terrenos compuestos por sales del Triásico, disolviendo sus sales. A su paso por Cambrils del Pirineu, las aguas del Ribera Salada fueron durante muchos años aprovechadas para la obtención de sal
En documentos antiguos este río es llamado río de Altès.
El recorrido de este río desde el Pont del Clop hasta su lugar de nacimiento esta protegido por el EIN Ribera Salada.
Deshago el camino y me dirijo al Pont del Clop que atraviesa el río Ribera Salada.
Es un lugar muy pintoresco y de aguas cristalinas.
A este punto el río se ensancha y la calidad del agua, la poca profundidad de este tramo y la explanada que hay junto a él hacen que, durante el verano, el Pont del Clop se convierta en una playa de interior que atrae bañistas de Solsona y otras poblaciones cercanas.
Antes de pasar por el puente el río discurre por un fenómeno natural conocido como Canal Serpent. El agua se ha abierto camino en el conglomerado horadando un cauce serpentino, unas gargantas que hacen de este tramo del río un pequeño desfiladero de líneas redondeadas.
La leyenda del Pont del Clop:
Nova reunió en la plaça del castell de Terrassola per a bastir el pont fonamentat en la codinera on la Ribera Salada és impossible travessar en l’hivern i primavera. Els veïns no s’entenen, cansats de pagar i treballar pel senyor. Tots volen bastir el pont on els convé; les reunions sovintegen i les baralles acaben en aldarulls.
En una de les diputes un home mig en broma mig seriosament per trufar-se dels litigants, per deixar la minsa palanca usual, exclama: Mestre banyeta, us ho faria per cap diner, almenys treballa sempre a bon preu.
Encara no havia finit el xivarri promogut per la dita que s’afegia a la reunió un vianant que ningú no coneix i que disculpa la seva presència perquè vol demanar un gual fàcil per passar la ribera. Aleshores l’innoven que fer un pont damunt la Ribera Salada motiva la reunió i la baralla. Ell, fent el desentès respon: He oït que, realment, Mestre Banyetes, fa ponts i el preu contractat era quedar-se l’ànima del qui primer hi passa. La reunió esclafi una rialla en oir la resposta del nouvingut i unànime exclama: “Si coneixeu Mestre Banyetes, digueu-li que amb aquest preu, tracte fet”. I la gentada s’adreçà al cap de la serra per triar l’indret de la codinera i la facilitat de bastir-lo.
El vianant segueix el camí, la gent cansada de garlar s’acomiada amb el mot que el senyor indiqui lloc i dia per la nova sentada i amb la mofeta als llavis d’aquell vianant que tractava amb el dimoni, el constructor de ponts. Si la proposta motiva rialles, un dia ben aviat les rialles es tornen ploralles. Com un tro s’ha esbombat per la comarca de la Ribera Salada del pont nou, de pedra escairada i amb un gran ull que engolirà la Ribera Salada per grossa que baixi. Els veïns volen visitar-lo, ningú s’arrisca a travessar-lo car tots recorden i estan convençuts del cap-mestre dels paletes que l’ha fet i la pèrfida condició amb que l’havia edificat.
Tothom parla del pont, tothom l’ha contemplat i lloat, ningú l’ha estrenat, ni tenen ganes d’estrenar-lo. Un veí de la Salada alta organitza la caça del senglar que malmet els trumfos i els moresc, la llebre pel dinar i per l’acabament de la festa estrenar el pont nou. L’organitzador de la festa ha explicat als caps de colla que calia fer passar pel pont un senglar o una llebre. Cap al tard, rere un dia que els caçadors refermen llur fama i assoleixen fer passar una llebre pel pont i trufar-se de l’astúcia de mestre Banyeta, encara la llebre no acaba de passar el pont que el Banyeta la rebat a la codinera on avui podeu contemplar el clot que hi marcà la llebre... No enrunà el pont nou de moment... Avui però tan sols veureu els forats dels fonaments. Tractes amb el Dimoni?. Déu ens guard. Avui no hi ha pont després de segles i estan els veïns convençuts, de la seva necessitat no acaben d’entendre’s.
Tras la visita se inicia se reemprende el camino, en subida, dirección a Montpol. A media camino a mano derecha tenemos el desvío hacia La Torre de Montpol y el Pla de Montpol. Este lugar es conocido como Les Cases del Pla de Montpol y ofrece servicios de agroturismo.
La finca está dedicada a la ganadería ecológico de vacas de raza pura Pirenaica, tiene además caballos, gallinas, …
Tiene casitas destinadas al turismo rural. El Pla, una masía de piedra restaurada, El Pla II y El Pla III, ambas eran pajares que se ahora se han acondicionado para servir de residencia.
Tras satisfacer mi curiosidad me dirijo al núcleo de Montpol, a la izquierda de la carretera, formado por Sant Miquel de Montpol y la antigua escuela rural dependiente de esta parroquia.
El edificio actual se construyó entre el siglo XVII y XIX y es heredero de una antigua iglesia ya desaparecida que se encontraba, junto con el castillo, en lo alto de la Roca de Montpol.
La antigua iglesia, de la cual todavía se aprecian algunos vestigios (parte del muro sur y restos del ábsides semicirculares) era románica.
En el siglo XVII tras años de litigios entre el obispado de Urgell y el de Solsona se construyó el actual edificio, en un lugar más accesible.
Sant Miquel de Montpol se quemó durante se repinto en el 1.958.
La vicaría, anexa en la iglesia, es hoy el centro de actividades musicales en la naturaleza de la Escuela de Música La Antàrtida. Alrededor de este entorno se organiza un circuito de fantasía para pequeños y grandes: los jardines de las cosas pequeñas, el bosque de los ritmos, el teatro de la escalera (a la antigua escuela de Montpol), el poblados de los “montpolins”..
Antes de llegar a la Roca de Montpol a mano izquierda nace un desvío hacia la C-26, al Pont de Querol pasando por la Fonda Casa Rural Angrill. Desde Angrill hay una excursión de unos 20 minutos hasta un refugio utilizado durante la Guerra Civil.
Al poco de ese desvío se encuentra l’Hostal del Roquer.
Sigo recto, indicador de Cambrils, circulando dirección Odèn
La Roca de Montpol es una gran roca de aspecto muy peculiar fácilmente visible, la peña rocosa que queda a su derecha se conoce como Roca dels Corbs.
Una vez arriba, escondidas entre la arboleda, unas pocas piedras señalan el antiguo emplazamiento del castillo de Montpol. Sobre estos restos se construyó la antigua iglesia románica. En la base de la roca todavía se pueden encontrar vestigios de antiguas viviendas que habían sido escondite de bandoleros y contrabandistas.
Dejo a mi derecha el desvío a Cal Casanova de Serentill y algo más adelante otro hacia Cal Carissols.
Entrando en el término municipal de Odèn a mi izquierda nace una pista forestal que me lleva al Serrat de Carissols (1.212 m) donde hay un Punt de Guaita. Y disfruto del paisaje.
Roc del Rumbau, Contrafort del Rumbau y la Valldan.
El Roc de Rumbau (Oliana), pegado a la Serra d’Aubenç (EIN Serra d’Aubenç i Roc de Cogull) y a su derecha la Serra de Turp (Zona ZEPA de Serra de Turp i Mora Condal-Valldan), el Segre pasa entre ellas.
La Serra de l’Obac y Montserrat sobresaliendo de la niebla.
Hacia levante las diferentes cabeceras de la Ribera Salada moteadas de casas y campos de cultivo dedicados la mayoría al cultivo de patatas.
Con la Serra de Campelles en el centro y el Puig Sobirà a la derecha.
Retorno al camino principal que va va en línea con la Serra Seca.
Tocando la carretera encontramos el Mirador de la Serra-Seca.
Es el punto más alto de la Serra Seca, 1.234 m, y es vértice geodésico.
Desde el parking hasta la plataforma de mirador hay una corta subida. Seremos testigos de la privilegiada panorámica del valle de la Ribera Salada y de las montañas del macizo del Port del Comte, de la Serra de Turp, la Serra dels Obacs y de la Serra Seca. Estas tres últimas forman un conjunto que se conoce como la Vall de les Anoves (entre Serra de Turp i dels Obacs) i les Encantades (Entre la Serra dels Obacs i la Serra Seca), con unas formaciones rocosas que recuerdan las características formas de la montaña de Montserrat.
En el parking, a pie de carretera, también se encuentra un monumento en recuerdo del paso del Tour de Francia, el verano de 2009.
El viaje continúa llano y luego en bajada hacia Cambrils (del Pirineu).
A nuestra izquierda dejamos atrás el Turó del Mals Aires y el Cap del Roc del Grau de la Serra Seca, entre los cuales se vislumbra parte del Vall de Les Encantades.
Enfrente tenemos la alargada franja calcárea de la Roca de Medes con las instalaciones de telecomunicaciones de Cal Jepet en la cima del Pla de les Guàrdies.
Si nos fijamos bien en la Roca de Medes veremos brillar alguna chapa, de seguro o reunión, de los empleados en la práctica de la escalada.
Al llegar a esta altura y con una clara visual de Les Tarteres el pueblo de Cambrils está debajo nuestro.
La avalancha de bloques que forman el lugar de Les Tarteres no se trata de una explotación de roca calcárea, sino que su presencia es natural, a pesar de que se desconocen las causas que lo provocaron. Muchos creen que se produjo a raíz de una serie de terremotos que sacudieron este territorio, pero de esto hace tanto de tiempo que la carencia de vegetación alrededor de los bloques graníticos lo desmiente. El que la sabiduría popular explica, es que entre los grandes bloques, por fenómenos de carstificación, se originaron grietas por donde surgieron unas corrientes de aire frío que los labradores aprovecharon para conservar los trumfos, las famosas patatas de Odèn.
El trumfo del alto Solsonès, cultivado a más de 1000 metros de altura, es una patata de montaña con un gusto y unas cualidades especiales. Este tubérculo se cultiva con métodos naturales y artesanales. Se encuentra integrado en la gastronomía de la zona, pero uno de los momentos del año donde se hace más presente es durante la Feria del trumfo y la Trufa, celebrada cada mes de marzo en Solsona.
Se llega al conjunto de la parroquia de Sant Martí de Cambrils i del castell. Hay un sendero bien señalizado para acceder a las ruinas del castillo y de la ermita de la Mare de Déu del Remei. Hay una buena vista de la vall de Cambrils.
El pueblo de Cambrils, que actualmente pertenece al municipio de Odèn, está formado por varias masías diseminadas al norte de la iglesia, bajo la vigilancia del castillo ensartado sobre un cerro de la serralada del Bartoló Vell al sur de Santa Maria y por el Tossal de Cambrils al sud-oeste, con la presencia de un enorme caos de rocas conocido como Les Tarteres. situado enfrente mismo, se encuentra a la cabecera de la Ribera Salada, el nombre de la cual hace referencia a la cantidad de sal que contiene, explotada desde antiguo tal como se puede adivinar por la presencia, un chico por debajo de la iglesia, del molino de Cambrils y de su salino, lugar donde se preparaba la sal sacada del río.
El edificio actual de Sant Martí de Cambrils pertenece a una iglesia levantada en el siglo XVII aprovechando el anterior edificio románico. Los orígenes del templo románico se pierden en los primeros siglos de la reconquista, con una mención al acto de consagración de la catedral de la Seu d'Urgell en 839 con el topónimo Kabrils, haciendo referencia a un lugar donde se agrupan las cabras. La iglesia románica fue consagrada en 1051 por el obispo de la Seu d'Urgell Guillem Guifré. Mientras que la señoría de este lugar pertenecía a los vizcondes de Cardona durante la etapa medieval, la parroquia de Cambrils era propiedad compartida mitad por mitad entre Santa Maria de la Seu d'Urgell y Sant Miquel de Cuixà: a cambio de su protección contra los sarracenos, tenían que ceder un tercio de sus réditos a dichos monasterios.
Sigo por la carretera. A la derecha queda el acceso al càmping de La Comella y me dirijo hacia la casa que forman el núcleo de Cambrils del Pirineu.
Llegamos a la L-301, enfrente la fonda de Ca l’Agustí. Esta carretera se dirige a Sant Llorenç de Morunys.
No se han recorrido unos 600 metros y encontramos el desvío a la instalaciones del Salí de Cambrils.
El Salí de Cambrils es una de las pocas salinas de montaña de toda Cataluña. Es una de las tres explotaciones únicas en Catalunya y data del 1.780.
Está emplazada en un lugar escarpado. Es una antigua explotación de obtención de sal artesanal, aprovechando las surgencias de agua salada de la Ribera Salada, obtenía sal por evaporación de este líquido. El agua salada se almacenaba en grandes balsas y desde estas balsas se transportaba a las eras o bancales de evaporación con un sistema de canales de madera, regueras y regueras.
Las eras o bancales de evaporación se construían con baldosas de arcilla porque el agua no se filtrara, y se llenaban con unos tres centímetros de agua salada. Se necesitaban tres días de buen tiempo porque se evaporara el agua y, después, hacían montones con la sal y se ponía en unos tendederos. Para acabar el proceso, con unos sistema de raíles y vagonetas, se transportaba hasta el almacén, donde se molía y se guardaba para traerla a vender.
La alta concentración salina de las aguas del Salí –que alcanza los 300g. de sal por cada litro de agua, procedente de las evaporitas del Keuper- se asemeja a la concentración existente en el Mar Muerto de Jordania, que es el lago más salino de todo el mundo –con unos 350r. de sal por litro de agua.
1.963 fue el último año en que se sacó sal de la explotación del Salí de Cambrils.
Tras ser restauradas (se abrieron en el 2.009) a parte de las visitas guiadas al Salí, donde se muestra cómo extraían la sal y cómo la almacenaban, actualmente se puede disfrutar de forma terapéutica de sus piscinas de agua salada.
Volviendo a la carretera continúo el viaje. Se recorre cerca de 1 km y a la mano izquierda encontramos la Font de Cal Sala, también conocida como Font del Racó, cerca de la casa de Cal Sala.
Es una surgencia, sita al pie de carretera, que en la época de lluvias hace como una pequeña y pintoresca cascada.
Cuentan las leyendas que las brujas venían a peinarse y a contemplarse en las aguas cristalinas de esta fuente.
Estos seres míticos, así como también las pequeñas damas, o las damas verdes eran creencias muy arraigadas en estas tierras.
Durante los 5 km siguientes la carretera circula paralela a las estribaciones montañosas de la Serra de Campelles, en la zona que se denomina Esquers Del Torrent. La pared que más destaca por su verticalidad, altura y color, es la que hay al principio y en escalada se conoce como la Paret d’Odèn.
Y se llega a la collada del Call d’Odèn, que hace de cruce de carreteras.
A la izquierda tenemos la casa del Call d’Odèn dedicada al agroturismo y dividida en 3 apartamentos y complementada con otras tres casas: El Racó de la Guita, Les Planes y Palou de Call.
La carretera que nace a la derecha nos llevará en pocos metros a la iglesia de Santa Cecília de Odèn y al Castillo de Odèn, del siglo XI, en ruinas y pegado a esta iglesia.
La iglesia es de estilo románico y se conoce desde el 839, siendo a partir del XII cuando empieza a cobrar más notoriedad.documental.
Ha sido restaurada pero se desconocen los datos de esta obra.
Tras visitar esta iglesia el itinerario continúa dirección Sant Llorenç de Morunys hasta que llegamos al inicio de la carretera que lleva a Montnou, asfaltada y a la izquierda.
Al poco de iniciar la pista encontramos una fuente a mano izquierda así como numerosos indicadores de excursiones por la zona.
El Montnou es un pequeño grupo de casas diseminadas situadas al pie de la carretera que va de Odèn al Prado de Bàcies situado en el valle que lleva el mismo nombre, entre las estribaciones de La Gespeguera y la Serra del Pinar y el Puig Sobirà.
Es un pequeño valle donde hay un montón de casas dispersas que basan su economía en el cultivo de la patata y la ganadería.
Mientras se circula en subida se pasa por el lado de todas esas casas: Cal Japolí (agroturismo), Cal Pinassa (en ruinas), Corral de Pedra (comidas caseras). Cal mateo, Cal Ton Riu,...
Al lado de la Font dels Pastors encontramos una estatura dedicada al décimo aniversario de la celebración del concurso de Gossos d'Atura a Odeǹ.
A la altura del Coll de la Mata acaba la subida y la pista pasa a tener un firme defectuoso, conserva el asfaltado pero a clapas, y se adentra en la zona conocida como Prats de Canalda.
Se continua por la pista principal hasta llegar punto de desvío, donde está ubicado el Primer Xalet. Zona conocida por una excursión anterior.
En este punto ya no hay asfalto. si continuamos recto, dirección este. es una pista forestal en buen estado. Pasaremos por el Torrent d’Ordoll. Hay que seguir por la pista principal, en ocasiones girando a la derecha y guiándose por los carteles indicadores de Coll de Jou.
Textos enriquecidos con la ayuda principalmente de el blog Quatre Estacions, y las webs Fem Turisme, Solsonès y Fem Turisme. Cat.
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