Por estas fechas, como cada año, desde que tengo uso de razón, desde antes de tenerlo mis padres y en fin... desde hace mucho antes se celebran las tradicionales fiestas de navidad.
Si bien son unas fechas en las que lo festivo va arrinconando a su origen religioso, como puede verse en los motivos navideños que adornan nuestras calles que son cada vez más festivos e insustanciales, alejados de su motivación religiosa, y cada vez hay más gente que aprovecha estas fechas como unas minivacaciones, en cierta medida todos, en esta civilización, nos vemos implicados y algunos hasta arrastrados por la dinámica de reuniones y comidas familiares, de empresa y de colegas.
Como no puedo ser una excepción aquí cuelgo unas pocas fotitos de lo acontecido hasta ahora, y que de aquí a Reyes aún quedan días..
En Nochebuena, una conjunción astral permite que mi madre reuna en su mesa a su cuatro hijos, con sus respectivos. Circunstancia que no se daba desde no sabe cuando.
Y para Navidad a casa de mi hermana. Que se ha trasladado a trabajar a Cataluña y así conocíamos y estrenábamos su chabola.
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