domingo, 29 de marzo de 2015

Fracturas del Navicular (Escafoides del pie) No Complicadas ni Desplazadas (Parte 2) y Diagnóstico Diferencail


Caso 2.-
En este otro caso otro varón, más joven que el anterior, refiere que se cayó por las escaleras de su casa entrada la noche y sufrió una torcedura del tobillo izquierdo.
A la exploración presentaba signos inflamatorios y dolor a la exploración en el maleolo interno y articulación tibio-astragalina del tobillo izquierdo.
Como era un paciente joven se pidió una radiografía comparativa entre ambos pies para descartar que las posibles imágenes patológicas que pudieran observarse no se correspondieran con los procesos de osificación.
En la RX se observa una fractura del hueso navicular del pie izquierdo y se remite al hospital de referencia.


(La magen izquierda de corresponde al pie izquierdo y la derecha al correspondiente)

Se confirma el diagnóstico: Fractura Escafoides Tarsiano de región lateral no desplazada.
Se coloca botina de yeso y se complementa con:
Profilaxis antitrombótica; deambulación en descarga con botina (La descarga implica la no carga o peso sobre el hueso y evidentemente el no apoyo.) y medicación AINE y protección gástrica.
Se alta a domicilio y control por consultas externas.
A las 5 semanas se retiró la botina de yeso. El balance articular era bueno, la atrofia de los tejidos leve y la deambulación dentro de lo normal.
Se programó para fisioterapia pero de dió de alta voluntaria alegando que no le hacía daño y que podía hacer vida normal.

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PRUEBAS COMPLEMENTARIAS.-

RX simple. Proyecciones anteroposterior, lateral y oblicua.
Debido a la morfología y situación del navicular en el tarso puede ser difícil establecer el diagnóstico exacto; es fácil ver o suponer que existe una lesión del escafoides, pero es más complicado conocer la forma de la línea de fractura, pues muchas veces se superponen las imágenes.
En las lesiones por sobrecarga se observa la fisura en sentido sagital en el tercio medio y no existe desplazamiento.
Saxena et al proponen una clasificación radiográfica para las fracturas de escafoides:
Tipo I, fractura de la cortical dorsal;
Tipo II, fractura prolongada al cuerpo escafoideo, y
Tipo III, fractura que atraviesa las dos corticales; con las siguientes modificaciones: A, necrosis avascular parcial; C, cambios císticos en la fractura; S, esclerosis de los márgenes fractuarios.

En los casos dudosos son de ayuda el TAC y la RMN. Las imágenes que ofrecen suelen aclarar la naturaleza de la lesión.
De forma accesoria, y para situaciones puntuales, también servir la práctica de una escintigrafía ósea y una densitometría ósea.

TRATAMIENTO.-

Se realizará en función del tipo de fractura.
El objetivo es restaurar un pie plantígrado e indoloro, estable y capaz de sustentar el peso corporal.
Es importante reducir el riesgo de artrosis deformante post-traumática.

En caso de una fractura por avulsión de los ligamentos plantares y dorsales y cuando una fractura es simple, si los fragmentos no están separados y se observa una buena reducción, el tratamiento será conservador, siendo suficiente la inmovilización con una bota de yeso bien modelada plantarmente y sin permitir la carga en 6-8 semanas.
Durante este periodo estará afectada la capacidad de subir/bajar escaleras, de permanecer de pie durante periodos incluso breves, o caminar distancias cortas. Será necesario el uso de muletas, bastones, andadores, o sillas de ruedas.
Posteriormente se colocará una plantilla rígida con buen apoyo astragaloescafoideo y se permitirá caminar al paciente. La ortesis se prolongará unos 6 meses, con el uso de un calzado cómodo pero recio, en especial que sujete lateralmente. La acción de caminar es suficiente para una recuperación completa, y no requiere una recuperación funcional específica.
La avulsión desplazada del tibial posterior es la única indicación quirúrgica de este grupo, pero no debe confundirse con esta fractura con un navicular accesorio (márgenes regulares, redondeados).

En otros casos más graves puede haber gran conminución y separación de los fragmentos. De entrada se aconseja la reducción manual, con aplicación de anestesia localmente rodeando el foco fractuario.
Cuando la reducción no se mantiene o es imposible, cosa no infrecuente, deberá recurrirse al tratamiento quirúrgico.

EVOLUCIÓN .-

Las consecuencias de este tipo de fracturas se correlacionan con la severidad de la lesión y la estabilidad de la reducción.

Cuando se trata de una simple fisura del escafoides, la lesión puede pasar inadvertida, aunque una mala curación puede ser causa de dolores crónicos, y más en deportistas.

Las fracturas por avulsión del escafoides tienden a evolucionar muy bien cuando se reconocen de forma temprana y reciben el tratamiento adecuado.
La complicación principal de las fracturas por avulsión del escafoides es la falta de consolidación sintomática. En caso de ser una fractura de la tuberosidad del escafoides, puede abocar a veces en una disfunción del tendón del músculo tibial posterior y a un pie plano adquirido.

En las fracturas del cuerpo, siguiendo la clasificación de Sangeorzan, suele haber buenos resultados en el 100% de las fracturas tipo I; en el 70% de las de Tipo II y en el 25% de las de Tipo III.
Las fracturas del cuerpo del escafoides pueden evolucionar hacia deformaciones y artrosis post-traumáticas. El tratamiento conservador con agentes antiinflamatoriosy soporte ortésico puede ser eficaz, pero requiere la fusión de la articulación afectada. La pérdida funcional es significativamente mayor en el caso de una fusión astragaloescafoidea que en el caso de una fusión escafoideocuneiforme.
La falta de consolidación de una fractura por avulsión dorsal se trata mediante la escisión del fragmento no consolidado.
La falta de consolidación de fracturas de la tuberosidad del escafoides se trata mediante reducción a cielo abierto y fijación interna retardadas o la escisión del fragmento no consolidado con avance concurrente del tendón del tibial posterior.

A largo plazo existen tres complicaciones graves:
- El aplastamiento del escafoides, que ocasione un pie plano postraumático;
- La osteonecrosis del escafoides, a veces acompañada de la cabeza del astrágalo, y aunque menos importante, pero sí molesto,
- El síndrome de distrofia ósea refleja.

La aparición con el tiempo de una artrosis subastragalina implica que hubo participación en la zona astragalocalcánea.

PATOLOGÍA DEL ESCAFOIDES y DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL.-

Básicamente hay que distinguirlas del Escafoides Accesorio y del hueso sesamoideo supernumerario.

ESCAFOIDES ACCESORIO.-

El escafoides accesorio tarsiano es una variante anatómica ósea, situado detrás de la tuberosidad posteromedial del escafoides. Se presenta en un 4-21% (10%) de la población y es bilateral en el 50- 90% de los casos. Puede ser bífido.
En la adolescencia suele fusionarse con el escafoides.
No confundir con el hueso sesamoideo del tendón tibial posterior.
En un 2% permanece separado.

Hay tres tipos de escafoides accesorio según tamaño, morfología y relación con el navicular.
El tipo 1, Auténtico sesamoideo u os tibiale externum es un hueso redondeado u ovalado, de 2 a 3 mm de diámetro y situado dentro de las fibras del tendón tibial posterior.
El tipo 2 o Auténtico escafoides accesorio es el más frecuente, tiene una forma triangular y se une al escafoides por medio de tres uniones posibles:
Unión fibrocartilaginosa
Unión hialina
Mixta u ósea
La estabilidad de esta unión hará que sea más o menos sintomática.

El tipo 3 o Escafoides cornupeto. Se forma al crearse un puente óseo completo entre la tuberosidad posterior del escafoides y el accesorio tipo 2. El resultado es un escafoides grande con una tuberosidad posterior prominente.



El navicular accesorio está situado medialmente a la tuberosidad del escafoides. El tibial posterior se inserta en él, pero también da expansiones a las tres cuñas y a las bases de los metatarsianos centrales.
El escafoides accesorio tipo 1 es asintomático y el tipo 3 rara vez da síntomas, mientras que el 2 puede cursar con clínica de dolor y/o hinchazón en la cara interna del pie, que se agravan con el ejercicio físico y el sobrepeso.

Navicular Accesorio (Tipo II), Bilateral (Izda) y Navicular con Sesamoideo (Dcha)

Se han dividido todas las variantes anatómicas sintomáticas en tres grupos. El escafoides accesorio pertenece al segundo grupo, el de los osículos con una sincondrosis congénita que sufren cambios degenerativos o traumáticos.
El dolor se asoció a la presencia de pie plano por la inserción anómala de las fibras del tendón tibial posterior en el escafoides accesorio.
Sin embargo se ha demostrado que el tendón tibial posterior no es necesario para mantener el arco longitudinal del pie y que el dolor se debe a los microtraumatismos repetitivos producidos a través de las fibras del tendón tibial posterior sobre la sincondrosis del escafoides accesorio.


Lesiones del Tibial Posterior y de su Inserción escafoidea

Como medios diagnósticos son útiles la gammagrafía con metilendifosfonato marcado con Tecnecio 99 metaestable pues muestra un incremento de la fijación del radioisótopo en el escafoides accesorio doloroso .
La RM permite valorar la afectación del escafoides accesorio, de la sincondrosis y de los tejidos blandos adyacentes. El patrón de alteración de la señal en RM por edema de la médula ósea en el escafoides accesorio consiste en hiposeñal en T1 e hiperseñal en las secuencias con supresión de la grasa.

Dependiendo del dolor y de la impotencia funcional de adopta una actitud terapéutica u otra.
Si el cuadro es muy doloroso empezaremos con una inmovilización con una férula tipo Walker, durante 3-4 semanas.
Posteriormente se realizará tratamiento de fisioterapia con métodos antiinflamatorios, terapia fría y medidas de rehabilitación.
A la fisioterapia se asociara una ortesis plantar personalizada bajo molde de escayola, tomando el molde en carga controlada. El objetivo de la ortesis plantar es lateralizar el eje de carga para que el tibial posterior trabaje con menos potencia y no cizalle la unión fibrocartilaginosa del hueso accesorio.
El calzado será un factor importante a tener en cuenta, buscando que el zapato no provoque presión en el escafoides para evitar inflamarlo.
Si todo esto falla se recurre al tratamiento quirúrgico el cual consiste en la resección del escafoides accesorio y del cartílago adyacente y en la reinserción de las fibras del tendón tibial posterior en el escafoides.

ESCAFOIDES BIPARTITO.-

Variante infrecuente y de etiología desconocida.
Presenta dos fragmentos en forma de cuña: unos pequeños inferolateral y otro mayor inferomedial. La cabeza astragalina es más ancha y aplanada para poderse articular con ambos. Es bilateral en un 50% de los casos.
Se puede confundir con el sesamoideo del tibial posterior.
Puede causar síntomas per se y ser confundido con una fractura (los fragmentos aunque congruentes no tendrán una cortical interpuesta).

ENFERMEDAD DE KÖHLER (Necrosis Avascular o Aséptica del Escafoides).-


Enfermedad autolimitada en el navicular muy poco frecuente que suele producir dolor en el pie en edad infantil, generalmente alrededor de los 5 años y más frecuente en varones.

ENFERMEDAD DE MÜLLER-WEISS.-


Es una osteonecrosis espontánea del escafoides tarsiano en adultos. Es rara y afecta con más frecuencia a las mujeres y se presenta de forma bilateral, siendo la unilateral menos frecuente..

COALICIÓN TARSIANA.-

Son fallos en la segmentación completa de dos o más huesos del tarso.
Es una fusión anómala entre los huesos del tarso que puede ser fibrosa (sindesmosis), cartilaginosa (sincondrosis) u ósea (sinostosis); así como congénita o adquirida, e intra o extraarticulares.
Ocurren en el 1% de la población, los síntomas surgen en la 2ª o 3ª década de la vida y son más comunes en varones. y bilaterales en el 20-25%
Las más comunes son la Calcaneoescafoidea y las Astragalocalcánea.
Se debe sospechar y descartar en niños y adolescentes con una historia de esguinces de repetición en el tobillo.

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Esta información es de carácter general e informativa y en ningún caso se puede entender como un consejo sobre tratamiento específico alguno ni suplir a una atención médica personalizada.

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Con una ayudita de:

- Congreso SERAM 2012.
- Centro Bonanova Barcelona.
- Blog del Doctor López Capape.
Revista Jano.
- Ortopedia Vol1.
- Curso de Pie y Tobillo. Fracturas de medio y antepie.
- MAPFRE MEDICINA, 2001; vol. 12, n.° 2 .

viernes, 27 de marzo de 2015

Fracturas del Navicular (Escafoides del pie) No Complicadas ni Desplazadas (Parte I)


Caso 1.-
El varón de unos 27 años refiere que estaba corriendo por la vía pública, a un buen ritmo, y que se distrajo un momento. Como el firme era irregular esa distracción causó un desequilibrio en su carrera y mientras intentaba mantener la verticalidad hizo un movimiento brusco con la pierna izquierda para no caer, con tan mala suerte que fue como si diera una patada directa a una baldosa que sobresalía del suelo.

Empezaron unas molestias -dolor e impotencia funcional- en ese pie que fueron en aumento a lo largo del día por lo que acude al CUAP.
En el pie izquierdo se aprecian signos flogóticos secundarios a un traumatismo: eritema, edema y hematoma subcutáneo a nivel del tarso del pie izquierdo y dolor a la palpación, sobre todo, en el lado tibial.
Trofismo neurovascular distal conservado.
Se practica una exploración radiográfica y se observa una Fractura Intraarticular del Navicular en el plano horizontal de ese hueso.
Se le administra analgesia puntual y se remite al traumatólogo de urgencias en el hospital de referencia.

Se confirma en diagnóstico y se procede a:
Inmovilizar con botina de yeso.
Reposo relativo.
Mantener la extremidad elevada y movilizar dedos para evitar edemas.
Mantener la botina y extremidad en descarga durante 6 semanas.
No iniciar deambulación completa hasta las 12 semanas.
Heparinización subcutánea, analgesia y protección gástrica.
Control por trauma de zona.

Fractura Hueso Navicular del pie izquierdo de una varón

Misma fractura desde otra proyección

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ANATOMÍA.-

El hueso Navicular, o escafoides del pie, recibe este nombre por la forma de barco que tiene.
Es un hueso corto y asimétrico (es más ancho que alto y aplanado de delante hacia atrás; su eje mayor es oblicuo hacia abajo y hacia adentro, y su aspecto es arqueado, de convexidad superior,) que se encuentra en la cara interna de la segunda fila del tarso.

Se describen en él cuatro caras pues está rodeado:
− hacia delante, por los tres cuneiformes,
− por atrás, por el astrágalo,
− hacia fuera, por el cuboides.
y dos extremos
La extremidad interna es una voluminosa apófisis: el tubérculo del escafoides, donde se inserta el tendón del tibial posterior.
La extremidad externa presenta:
−  Una faceta articular para el cuboides, cerca de la cara anterior; sobre ella está la inserción del haz interno del ligamento en Y de Chopart.
− Una faceta articular inconstante con el calcáneo.

Sus lesiones no son muy bien conocidas, circunstancia que favorece que en ocasiones sus patologías o lesiones puedan ser muy incapacitantes.
Es el último hueso del pie en osificarse completamente. El núcleo de osificación aparece entre los 18 y los 24 meses en las mujeres, y entre los 24-30 meses en los varones.

Visión caudal y craneal de los huesos pie

Visión medial y lateral del pie

Huesos del tarso y carillas articulares

BIOMECÁNICA.-

El pie está dividido en tres unidades anatomo- funcionales: el retropié, el mediopié y el antepie.
El retropié constituido por el astrágalo que se articula con el calcáneo, formando la articulación subastragalina (punto de apoyo posterior).
El mediopié está formado por el escafoides, que se articula con la cabeza del astrágalo, el cuboides que se articula el escafoides y las bases de los metatarsianos.
El antepié, formado por los 5 metatarsianos y las falanges proximales, medias y dístales (estas últimas del 2 al 5 dedos), articuladas formando los diferentes rayos del antepié.



La disposición de todos sus huesos entre sí forma una bóveda en la parte media del pie, que le da una gran resistencia para la carga de peso y el esfuerzo, y que está apoyada en tres puntos que se conocen como trípode podálico.
Los puntos de apoyo son:
- Tuberosidad del calcaneo
- Cabeza del 1 metatarsiano
- Cabeza del 5 metatarsiano
El único arco visible clínicamente es el longitudinal interno. La bóveda plantar se mantiene:
1. Por la forma propia de los huesos al encajar entre sí, como las piezas de un rompecabezas.
2. Por la acción de los ligamentos al unir las piezas óseas y que constituyen los principales mantenedores de la bóveda plantar.
3. Finalmente, los músculos tienen cierta acción en bipedestación ya que existe un balanceo: la contracción muscular restituye el equilibrio y ayuda a los ligamentos a mantener la bóveda plantar.
Se debe tener en cuenta que los ligamentos articulares son los elementos estáticos del pie que mantienen unidos los distintos huesos entre sí para darle soporte a los arcos

El escafoides forma parte del complejo conjunto especializado de huesos y articulaciones que hacen que el pie humano posibilite la marcha bípeda. Está situado en el vértice del arco longitudinal interno, formando parte esencial de la columna interna del esqueleto del pie. Las fuerzas de carga se transmiten desde los dedos del pie y los metatarsianos a las cuñas y de éstas al escafoides y al astrágalo.


En el pie se forman dos cadenas cinéticas, si consideramos que puede ser dividido funcionalmente en dos partes, que reparten el peso del cuerpo: un pie externo integrado por el calcáneo, cuboides y dos últimos metatarsianos y sus dedos, y un pie interno: astrágalo, escafoides y de preferencia el primero y el segundo metatarsianos.
El astrágalo, por su compleja morfología y su movilidad, compone junto a la mortaja tibioperonea la articulación más importante del pie. Derivando desde la cabeza del astrágalo al escafoides, las líneas de fuerza más importantes van a recaer en el primer radio, siendo la articulación primera metatarsofalángica la segunda en importancia dentro del pie.
La articulación astragalocalcaneonavicular junto con la articulación subastragalina, permiten el movimiento del pie en torno al astrágalo. La articulación astragaloescafoidea tiene movilidad en todos los planos del espacio, y su movimiento combinado con la articulación subastragalina es fundamental para la inversión y la eversión del pie.
La articulación del complejo astrágalo-calcáneo (retropie) con el navicular-cuboides recibe el nombre de articulación mediotarsiana, transversa del tarso o de Chopart.

El hueso escafoides es, pues, el paso intermedio obligado para pasar de la enartrosis con bastante movimiento astragaloescafoideo, a unas artrodias con muy poca movilidad, formada por la articulación escafotricuneana.



FRACTURAS DEL NAVICULAR O ESCAFOIDES DEL PIE.-

La frecuencia de estas fracturas es variable según la población estudiada. En la población general son poco frecuentes y con grandes posibilidades de pasar desapercibidas. Pero en la población deportiva -atletismo- pueden ser muy frecuentes, como cerca del 20%.
La falta de tratamiento provoca inestabilidad en la parte media del pie.

PATOGENIA.-

Las fracturas de este hueso pueden producirse por diferentes mecanismos que condicionarán el tipo y gravedad de las mismas.

Su mecanismo de acción preferente es el indirecto. Por su ubicación y forma, el escafoides es un punto débil, de modo que no es raro que en traumatismos de caída de altura, aplastamiento del arco longitudinal o traumatismos transmitidos centrípetamente desde el primero y el segundo metatarsianos se pueda producir su fractura.
No es fractura infrecuente en el ámbito deportivo debido a caídas o al traumatismo provocado al chutar un balón; también aparece como afección laboral por caída de pesos sobre el tarso o caída de altura sobre el antepié (que es como se debe caer para amortiguar el traumatismo). En la población general no tiene gran incidencia.

Las causa más frecuentes de fracturas de escafoides son las conocidas fracturas por estrés, secundarias a un trauma repetido en atletas que corren y saltan.
Las lesiones traumáticas que provocan fracturas por avulsión de la tuberosidad del escafoides son consecuencia de la tracción del tendón tibial posterior o la eversión forzada, mientras que las fracturas por avulsión de la parte dorsal del escafoides son secundarias a la tracción de los ligamentos talloescafoideo o deltoideo durante la flexión plantar forzada.
Menos frecuentes pero más graves son las fracturas del cuerpo del escafoides. Son secundarias a una importante carga de compresión axial sobre la parte anterior del pie, por lo general como consecuencia de caídas desde la altura o accidentes automovilísticos.

FRACTURA POR ESTRÉS.-

La fractura se produce habitualmente lentamente, dando síntomas leves que no impiden continuar con la actividad.
Estas fracturas se han descrito tanto en corredores y vallistas, como en jugadores de baloncesto. Se cree que fuerzas repetidas reiteradamente canalizadas a través del segundo metatarsiano y cuña media hacia el tercio central del escafoides durante la fase de despegue son la causa de la fractura. Clásicamente la fractura de estrés aparece en el área de máximo cizallamiento que corresponde a la unión de los dos tercios mediales con el tercio lateral del escafoides.

Los síntomas aparecen de forma insidiosa, siendo este uno de los motivos del retraso del diagnóstico. Existe dolor en el pie que aparece al correr, más si el atleta lo hace calzado con zapatillas de clavos y en pista de tartán. Inicialmente el dolor cede con el reposo y el cambio de calzado o superficie. Cuando el dolor aumenta de intensidad y duración, y el deportista no puede continuar con los entrenamientos o competiciones, suele ser el momento en el que se consulta al médico.ractura de estrés
La fractura se produce habitualmente lentamente, dando síntomas leves que no impiden continuar con la actividad.
Estas fracturas se han descrito tanto en corredores y vallistas, como en jugadores de baloncesto. Se cree que fuerzas repetidas reiteradamente canalizadas a través del segundo metatarsiano y cuña media hacia el tercio central del escafoides durante la fase de despegue son la causa de la fractura. Clásicamente la fractura de estrés aparece en el área de máximo cizallamiento que corresponde a la unión de los dos tercios mediales con el tercio lateral del escafoides.
Los síntomas aparecen de forma insidiosa, siendo este uno de los motivos del retraso del diagnóstico. Existe dolor en el pie que aparece al correr, más si el atleta lo hace calzado con zapatillas de clavos y en pista de tartán. Inicialmente el dolor cede con el reposo y el cambio de calzado o superficie. Cuando el dolor aumenta de intensidad y duración, y el deportista no puede continuar con los entrenamientos o competiciones, suele ser el momento en el que se consulta al médico.

FRACTURAS POR AVULSIÓN.-

Son las segundas en frecuencia.
Suelen ser consecuencia de una torsión brusca del mediopie o la eversión forzada que provoca el arrancamiento de un pequeño fragmento de hueso por la tracciòn del tibial posterior.
Las fracturas por avulsión de la parte dorsal del escafoides son secundarias a la tracción de los ligamentos taloescafoideo o deltoideo durante la flexión plantar forzada.
La deformidad es poco importante pero sí lo es la dificultad para caminar provocada por el dolor.
El índice de sospecha debe ser alto y deben solicitarse radiografías del pie para confirmar el diagnóstico. Con frecuencia solamente se identifica la avulsión en una proyección.
Según la zona afectada se pueden clasificar estas fracturas en dorsales, plantares o mediales.

FRACTURAS DEL CUERPO DEL ESCAFOIDES.-

Secundarias a una importante carga de compresión axial sobre la parte anterior del pie, por lo general como consecuencia de caídas desde la altura o accidentes automovilísticos.
En los grandes traumatismos, como pueden ser los aplastamientos y los accidentes de circulación, sus fracturas se pueden combinar con las de otros huesos del pie, en especial el cuboides, astrágalo o apófisis menor del calcáneo.

El mecanismo de lesión en estos casos es un traumatismo de alta energía (tráfico y caídas desde altura principalmente) con fuerzas axiales indirectas y con frecuencia asocia lesiones en otros huesos del pie como el cuboides.
El escafoides o parte del mismo se luxa o subluxa.
También pueden provocarse por aplastamiento fracturas importantes del cuerpo del escafoides.
Se pueden clasificar atendiendo al estudio radiológico en desplazadas y no desplazadas. El estudio puede completarse con un escáner (TAC).

Las fracturas no desplazadas se pueden tratar con inmovilización y descarga de 8 semanas.
La descarga implica la no carga o peso sobre el hueso y evidentemente el no apoyo.
Las fracturas desplazadas se pueden dividir según la Clasificación de Sangeorzan en tres tipos.
El tipo I (A) es una fractura de trazo único en el plano transverso u horizontal, dando lugar a un fragmento dorsal y otro plantar. La reducción abierta y síntesis con tornillos da buenos resultados en estos casos.
El tipo II (B) es una fractura en dirección de dorsolateral o plantar medial. El fragmento medial se luxa dorsomedialmente con respecto a la cabeza del astrágalo, y el antepie queda en aducción. El fragmento lateral suele sufrir conminución importante que dificulta o impide la osteosínteis, siendo necesario en ocasiones la fijación externa o la fijación escafocuneana para mantener la columna interna.
En las fracturas de tipo III (C) existe conminución central o lateral del cuerpo, desplazamiento lateral del antepie y subluxación de la articulación calcáneo cuboidea. El objetivo del tratamiento es conseguir un mínimo del 60% de superficie articular astragaloescafoidea congruente.

Los fragmentos, a veces múltiples, pueden desplazarse en sentido dorsal o interno, siendo el primero especialmente voluminoso. Los ligamentos que rodean este hueso, en especial el ligamento escafoideo inferior y los tendones que se insertan en su periferia, como tibiales anterior y posterior, forman una cubierta fibrosa y le confieren mayor resistencia, pero a su vez pueden ser la causa de las frecuentes escafoiditis de inserción.

Clasificación Fracturas del Cuerpo del Escafoides


DIAGNÓSTICO CLÍNICO.-

El paciente explica el mecanismo lesional.
En relación con el traumatismo, y a veces algo posterior, aparecen dolor, tumefacción en la parte dorsal e interna del pie, equimosis (hematoma subcutáneo), y gran claudicación a la marcha y el dolor se exacerba al apoyar simplemente el pie en el suelo.
La presión sobre la zona permite localizar el dolor, y ocasionalmente se puede palpar las prominencias de los fragmentos que sobresalen o están luxados, con una deformidad evidente.

Imagen que puede corresponder a una gran variedad de lesión en esta zona

En 24 h el edema puede ser considerable, con aparición de la equimosis, que se desplaza subcutáneamente y no tiene que limitarse al área de la lesión, puede abarcar todo el pie y el tobillo.
Este fenómeno puede retrasar una intervención quirúrgica y hay que recurrir a una bomba pédica compresiva.
Si se intenta forzar plantarmente equinizando, el dolor se incrementa debido a la compresión que hacen los huesos vecinos sobre el fracturado. También se puede provocar el dolor percutiendo a distancia en sentido axial sobre el primer metatarsiano.
Hay que practicar un examen físico y una evaluación neuro-vascular para excluir lesiones asociadas.
En las lesiones severas se ha documentado un síndrome compartimental que debe ser tratado antes de reducir la fractura. Dicho síndrome se relaciona más a menudo con fracturas sufridas por una lesión por aplastamiento.
En ocasiones la clínica es superponible a un esguince de la articulación de Chopart o de la mediotarsiana.

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Esta información es de carácter general e informativa y en ningún caso se puede entender como un consejo sobre tratamiento específico alguno ni suplir a una atención médica personalizada.

jueves, 19 de marzo de 2015

TORRELLETES


Torrelletes es una población que pertenece al término municipal de Castellet i La Gornal, en la comarca del Alt Penedès, de la provincia de Barcelona e incluida en el Parc Natural del Foix.
En esta población había dos sectores de escalada. El conocido como La Part de Baix es en el que actualmente se practica la escalada y está reseñado en las guías. El conocido como Les Boveres está bajo regulación y tiene prohibida la práctica de esta actividad.
Las zonas de escalada deportiva conocidas como La Part de Baix y La Bòveda de Torrelletes están ubicadas en el macizo de la Serra Mala, en la parte inferior de Torrelletes, enfrente del Torrent del Llampeig.

La Bóveda de Torrelletes en primer término y La Part De Baix en la mitad derecha

ACCESO.-

Básicamente consiste en llegarse hasta L’Arboç vía el Vendrell o Vilafranca del Penedès y de hay a Castellet - Torrelletes o vía Vilanova i La Geltrú hasta Castellet pasando por el Pantà del Foix.
Desde BCN y como no teníamos prisa para llegar usamos L’Ordal.
Por la A-2 circulamos hasta que conectamos con la B-24 hasta Vallirana. Allí continuamos por la N-340 hasta la altura de Vilafranca del Penedès; la pasamos tras pasar la población de el Els Monjos seguimos circulando por la N-340 hasta L’Arboç.
Justo antes de entrar en el núcleo urbano de L’Arboç hay una rotonda. Usamos la rotonda para redirigirnos a Castellet i Gornal por la TP-2115.
Tras pasar el puente sobre El Foix y delante del núcleo urbano giramos a la izquierda y circulamos por la BV-2117 hasta Torrelletes.



Si optamos por venir por la Autopista AP-7/E-15 (dirección Tarragona) hemos de abandonarla por la salida nº 30 e incorporarnos a la N-340 en dirección Sur, y tras cruzar Els Monjos hacer el mismo recorrido ya señalado antes.
Ya en Torrelletes nos encontramos en una gran plaza circular, la atravesamos pegados a nuestra derecha y llegamos al carrer Sta Magdalena. Giramos a la derecha (a nuestra izquierda se sitúan el ayuntamiento y el dispensario).
Al final de esta calle hay un ensanchamiento a nuestra izquierda, es el primer parking.
Esta calle se continúa por una pista forestal. a unos 200 metros hay una cerrada curva de izquierdas, con unos discretos ensanchamientos a ambos lados. Es el segundo parking.
Del lado más abierto de la curva nace un camino muy evidente.



Para acceder a La Part de Baix.
Nada más tocar ese camino hay que girar a la izquierda para caminar por un senderito. Este senderito se orienta en paralelo al Torrent del Llampeig. Tras pasar por un terreno de matorrales discurre por un lecho rocoso. Vamos encontrando hitos que nos acercan al borde la cornisa y a una cuerda fija que hace de pasamanos, y marca el inicio del descenso hasta el pie de vía.
El pasamanos es más útil de salida que de llegada, pues es muy laxo. Para acceder es casi mejor ir desgrimpando con cuidado.



Para acceder a la Cova de Torrelletes (de Skalatopi).
A partir del parking caminamos por el gran sendero, ignorando el senderito, .y antes de que el camino comience a descender encontramos una fita a la izquierda, bajamos hasta encontrar una cuerda para bajar (muy fácil) y a la izquierda veremos el sector, es la continuación de la zona de siempre y con misma orientación.

ESCALADA.-

Es una modesta franja de roca calcárea de poca altura y longitud dividida en dos secciones. La más grande, conocida como La Part de Baix, es una placa vertical adornada con algún repecho y la más pequeña, conocida como La Cova de Torrelletes, está situada a la izquierda si se mira de frente, es un techito, y con un acceso diferente. La placa principal nos ofrece problemas fundamentalmente plaqueros, con algún repecho o minitecho ocasional, de una altura de entre 10 y 20 metros, y, a pesar de la impresión que da la pared, más interesantes de lo que parece.
En total hay cerca de unas 39 vías que abarcan un abanico de dificultad del tipo de grado bajo o medio bajo (de V a 7a+), con incursiones muy testimoniales en el medio alto (un 7c). La pared está equipada aprovechando el máximo de sus posibilidades. Es francamente difícil vislumbrar una línea por equipar que no machaque o perjudique lo que ya hay. Se tiene que prestar mucha atención a los croquis pues hay vías que interaccionan entre ellas; por ejemplo una vía puede tener un inicio independiente pero luego continuar tanto por la vía que queda a su izquierda como por la que queda a su derecha.. Y otros juegos.

Se empezó a equipar con paraboles pero dada la calidad de la roca se tuvieron que sustituir todos los paraboles por varilla roscada anclada con resina epoxi. Con chapas de calidad inox.
Las vías más modernas están equipadas con tensores químicos.
Reuniones en su mayoría de argolla, unas pocas con mosquetón.
En la zona de Cova de Torrelletes es posible que se hayan empleado paraboles en lugar de varilla roscada.

Pies de Vía

La roca puede ser blanda, en términos de equipamiento, pero de cara a la escalada es abrasiva y punchosa, aunque ya hay algún agarre un poco marmolito. El agarre predominante es el de agujero combinado con regletas de variadas orientaciones.
Hay itinerarios tanto de continuidad como de bloque, o de dificultad concentrada en muy pocos movimientos.
Tiene fama de tener el grado apretado. De acuerdo con las vías que he hecho yo lo he encontrado o normal, o algo regalado. Ninguna ha sido de “menos, no puede ser”. También se le echaba en cara que alguna vía tenía una primera chapa excesivamente alta. Creo que esa situación se ha corregido en algún trayecto pues estando equipado con un tipo de anclaje (varilla) en su totalidad ahora hay un primer seguro de un anclaje diferente (tensor químico).

La guía más completa, y al día, actualmente es la de Escalades a 20 Minuts de Vilanova..
Los nombres al pie de vía ayudan a ubicarse.
.Pie de vía muy decente.




Orientación Sureste. Muy buena opción para el invierno pues al estar algo hundida en el terreno acumula el calor del sol y hay disponibilidad del mismo hasta las 15-16 h.
En época de días largos, aunque hay sombra por la tardes la recomendación general es evitarlo, sobre todo en verano.
.Es posible que en el futuro la zona de amplie con las paredes que quedan enfrente, pues se ven señales de equipamiento; pero vaya usted a saber si es algo que está en activo o ha quedado olvidado.



LA JORNADA.-

Es una zona de escalada cercana a BCN que no conocía y al fin puedo decir que ya la he visitado; que ya he estado. Una espinita menos y más teniendo en cuenta que, para lo pequeño que és, es una lugar de escalada bastante blogeado (Oskar, Xavi Diez, etc…).
Para la ocasión he sido acompañado por K (ya conocedor del lugar) y Laura, que tampoco lo conocía.
La maratón retrasó mi salida de BCN pero como hacía un día muy soleado y no había mucha prisa nos llegamos vía el puerto de L’Ordal en lugar de pagar autopìsta. Para regresar y proveyendo la habitual caravana por L’Ordal a causa de los semáforos de Vallirana y el regreso de la gente tras disfrutar del fin de semana usamos la AP-7 (4€ el peaje).

Día muy soleado. Calor en el pie de vía sin llegar a un nivel de insoportable, y buena temperatura y tacto en la escalada. Al principio de la tarde el día se empezó a estropear, mejoró la temperatura pero tuvimos dos amagos de lluvia que quedaron en anécdota.
Escalamos a buen ritmo y aunque las vías son cortas dejan buen sabor de boca. Como no conocía este sitio me dedique a picar de todo un poco.

Subsector El Foradet.

K, director de operaciones, nos ubicó en este pie de pared para empezar por la abundancia de vías con grado bajo.

> Rocasana, V+.
Vía de continuidad sobre buen agarre. Sólo tiene el problema de acertarlos.

K en Rocasana

> La Tonta, 6a.
Línea con un pasito a bloque en su inicio, algo peculiar. Una vez resuelto es muy similar a la anterior.

En La Tonta

> Torrelletes, 6a (Orientada de 6a+).
Trazado de continuidad de dificultad más repartida que el anterior

K en Torrelletes

Subsector La Cachonda.
Como en estas vías habíamos estado a pleno sol cambiamos a un paño de pared que además de estar más resguardado permitía el acceso a vías de mayor dificultad.

> Foc Foll, 6a+ (Orientada de 6b).
Problema bastante mantenido con una sección más tensa y técnica a media altura.
La morfología de la roca y equipamientos posteriores dan la impresión de que la vía hay que empezar a atacarla por la vertical, por el esperoncito, pues es esa sección la que parece que protege el primer seguro. En realidad hay que entrarle a la vía por la izquierda, la lógica de los buenos agarres conduce por ahí.

Laura en Foc Foll

> Mai no Diguis Mai a un Volai, 6b (Orientada de 6b+).
Vía con una sección a bloque justo en su inicio con unos agarres un poquitín pulidos. Es intenso hasta que chapas la segunda. Luego muy relajado y de ir haciendo con agarres estupendos hasta la R.

K en Mai Diguis Mai a un Volai

> La Gorda, 7a.
El problemón, el 7a estrella de esta escuela.
Y ahí se quedo, a mejor vida, u oportunidad.
Una entrada sin problemas se sigue de un tramo donde los agarres empiezan a ser pequeños y donde te has de ir colocando bien; y este tramo conduce a la sección clave de la vía: un paso a bloque de un agarre ínfimo y pies muy difíciles de ver seguido de un exprimidor movimiento muy atlético.
Vía para la que hay que tener los dedos adecuados y que, al ser difícil a vista, necesita de tientos que vayan matizando la secciòn clave.

Yo en La Gorda

Idem

> G.M.L’A, 6c.
Una línea magnífica y altamente recomendable. Para Oskar es una cuestión de tres secciones a bloque empalmadas, y para mi es una línea de continuidad. Pa gustos,En La Gorda colores.
todo caso es una sucesión de intensos, variados y atléticos movimientos capaces de satisfacer a los paladares más exigentes.

K en G.M.L'A

Yo por mi hubiera seguido un rato más, pues me encontraba bien, pero ya tocaba recoger. Esa sensación era engañosa y el día me había exprimido más de lo que pensaba; las vías son más peleonas de que uno cree. Al poco de emprender el viaje de vuelta me quedé dormido como un tronco, es lo que tiene no tener que conducir y viajar en el asiento del copiloto. Pero me desperté a tiempo para pagar el peaje; que conste.

CONSEJOS Y RECOMENDACIONES.-


Salvo el sentido común no hay una reglamentación en particular.
Es aconsejable abastecerse de agua antes de llegar a la zona.

La zona nació como reacción a la prohibición total (¿y excesiva?) de escalar en Les Boveres. Y aunque se intentó que la regulación fuera temporal,
(Per tant, i tenint en compte que les vies són per a gent amb nivell alt i que l'aproximació no és còmoda i que fins i tot no hi ha ressenyes, creiem que el perill de massificació de la zona no existeix i ens agradaria poder arribar a un acord per reequipar les vies desequipades i escalar en les èpoques en que les espècies protegides que habiten en aquesta zona no estiguin en període de cria com passa en moltes altres zones de Catalunya, Espanya i Europa.) esa iniciativa no prosperó.
Les Boveres está incluida dentro del Parc Natural del Foix y está prohibido escalar debido a la presencia de aves rapaces.

Coves de Les Boveres

Se empezó a equipar en el año 1990, tras pedir permiso al propietario de la finca, y con la colaboración de l’Agrupació Excursionista Talaia, que financió el 70% del material.
Esta zona disponía de unas 20 líneas que iban desde el 6a a un 8a (y projectos) y ofertaban una escalada muy técnica.
El Parc Natural del Foix se constituyó en el año 1993 declarándose zona protegida. Ello tuvo como consecuencia la limitación de ciertas actividades, la escalada entre ellas. Y sin que se intentará hacer una mínima regulación como se ha hecho en otras zonas de Cataluña y de España.
Hay carteles anunciado la prohibición y en el año 2003 los Agentes Rurales desequiparon algunas vías (no sin polémica).

martes, 10 de marzo de 2015

Can Camps (Els Camps - Montgrony)


Can Camps, también conocido como Els Camps (ambos nombres aparecen la cartografía del ICC) es un sector de la zona de escalada de Montgrony.
Se puede decir que es como un satélite orbitando alrededor del planeta principal pues tiene un parking y un acceso muy independientes del resto de sectores, y está como escondida por la arboleda. En el acceso las paredes las ves llegando a las mismas.
El hecho de permanecer aislado de la gran oferta, en número y grados, del núcleo de Montgrony ha ido preservando la calidad de su roca a diferencia de otros sectores más populares y transitados.

ACCESO.-

Desde el desvió al Santuari de Montgrony recorremos una distancia de 3,4-3,5 km según el cuentakilómetros de cada cual.
A esa altura, y tras una pronunciada curva de izquierdas, a mano izquierda de la carretera vemos un amplio arcén, con signos de uso, que sirve de parking, y puede permitir aparcar a 4 o 5 vehículos -turismos- sin incomodidad.
Desde el parking al acceso es muy cómodo.
Hay que cruzar al lado contrario al que se ha aparcado y caminar por unos campos despejados de arboleda y con algo de matorral. Llegados al extremo más distante empezaremos a encontrar fitas/hitos que marcan el sendero de acceso a Can Camps.



El sendero está bien fitado y debe entrañar ningún problema. Es llano en su inicio, luego sube un repecho por su izquierda, y, tras otro tramo recto un hito marca el descenso con tendencia a la derecha. Llegamos al subsector de la izquierda.
El sendero continúa descendiendo suave en busca del subsector de la derecha, bifurcándose a la altura del pasamanos. Desde aquí podemos ascender hasta la altura del pasamano y al pie de vía que queda a su izquierda o continuar caminando un poco más y, tras superar un repecho, acceder al pie de vía que queda a la derecha del pasamanos.
Tiempo de acceso de unos 10 minutos (+/-) y que cuando lo conoces se te hace muy corto.



ESCALADA.-

Calcáreo dividido en dos secciones de conformación muy variada; tanto en altura (10-30 mt) como en la morfología que surcan las vías. Podemos encontrar una combinación de secciones que ofrecen movimientos sobre chorrera, pasos atléticos con buen agarre y sobre placa técnica, de esos que te ponen al borde de un ataque de nervios. Todo lo necesario para disfrutar de una escala muy completa y divertida.

Equipamiento a base de paraboles, otras menos con químicos y muy testimonial con espit. Reunión con mosquetón o de anillas.
En alguna vía hay que hechar mano a la ingeniería de cintas para evitar el roce de la cuerda con algún resalte rocoso.
La dificultad de alguna de las vías está muy collada (por impresiones de otros visitantes y nuestras). En el subsector izquierda tenemos las vías más difíciles (8a, 8b, 8b+,...) y en el subsector derecha hay una buena representación de dificultades entre el 6a+ y el 8a.

Buen pie de vía. El pasamanos que sirve de puente de unión rápido entre las dos mitades de la zona derecha está un poco hecho polvo.
En la zona derecha el pie de vía está bastante protegido del sol por una cortina de árboles; no en toda su extensión pero si de forma suficiente para asegurar cómodo cuando el sol aprieta.

Pie de vía

Las reseñas en la guía de Escalades al Ripollès están algo desactualizadas. No hay nombre al pie de vía pero fijándose en los croquis no es difícil ubicarse. En todo caso al final de la entrada hay una discreta actualización.

En invierno, antes del cambio de hora, y en marzo, en el subsector de la derecha la zona del pasamanos hace de frontera. Hay sombra en la pared que queda a la derecha del pasamanos a partir de las 13:30-14 horas. Y en el lado izquierdo del pasamanos hay sombras de tamaño creciente a partir de esa hora, siendo sombra total a las 16:30-17 h.
Desconozco como funciona en el Subsector Izquierda.
En verano suele es un sector de tarde.

La Cinglera del Pla de la Feixa desde Els Camps

ELS CAMPS.-

La idea inicial, con Mauro, era ir a las Saleretes. Pero la previsión de cielo despejado y sol a plomo, sin ninguna posibilidad de quedar resguardados en el pie de vía, nos hicieron cambiar de planes.
Barajamos un par o tres de destinos y salió el nombre de Can Camps. Teníamos buenas referencias de él, y de que por la tarde tendríamos sombra, y era un lugar que quería conocer. Decisión tomada.

Tuvimos suerte de la pantalla de árboles que nos protegió del sol pues si, es de sombra por la tarde, pero la pared tiene varias orientaciones y no nace la sombra en todas ellas a la misma hora.
Con la guía de Escaladas en el Ripollès en la mano la zona más asequible para nosotros es la que queda en el margen izquierdo de la cuerda fija y ahí, antes del cambio de hora, hay sol casi toda la jornada.
Aseguramos bastante cómodos a la sombra y escalamos bajo el sol que, salvo dar un poco de calor, nos ofreció una térmica escaladora muy aceptable.

> Raoni, 6b.
Empezamos calentando en este 6b. Como esta debía ser la vía para calentar durante muchos años la chorrera de entrada tiene unos pies pulidos.
Vía de esas de “menos seguro que no és”, y más para calentar, de pasos atléticos, alguno bastante intenso, sobre buen agarre.

Mauro en Raoni

> Vía 3, 6a+ (Nueva línea sita a la izquierda, entre el arbolito y la Raoni).
Línea muy reciente ya que aún quedaban restos de tierra en zonas saneadas.
El aspecto roto de sus primeras metros da algo de respeto, pero aguantó.
Los movimientos más difíciles se encuentran en la entrada y, en general, es un trabajo de continuidad con buen agarre tanto en el primer y en el último tercio, con un segundo tercio de navegación más cómoda.

Mauro se llevó la mejor cosecha del día, encadenando las tres vías más difíciles que probamos, bien al segundo pegue, bien a vista.

> Sitting Bull, 7a+ (Orientada de 7a).
Trabajo este problema pues Mauro lo había montado tras calentar en Raoni; lo encadenó en su segundo tiento.
Es un problema muy bueno con tramos de todo tipo, y todos me dan trabajo. Yo he tenido mejores momentos pero el itinerario es duro y se me resiste en las tres secciones importantes que tiene, y en los dos pegues que le doy. Sobre todo el último paso, técnico y duro. Mauro era capaz de trabajarse el agarre clave como bidedo, pero yo solo podía hacerlo como monodedo, y de falange. Soy incapaz de hacerlo.
El problema queda aparcado, puede que para siempre, puede que para mejor ocasión.

Mauro en Raoni

Mauro encadenó Quin Fun Fa, un 7a+ (7a+/b a tenor de sus manifestaciones) en su segundo pegue, y Massa Vell Per Morir Jove a vista, un 7a al parecer bien puesto y que posiblemente se adapte mejor a mis posibilidades.

Para acabar el día pruebo L’Espiademonis, un 6b, equipado con espits. Es una vertical placa de calcáreo gris con una sección fina en la primera mitad del trazado que me tira para atrás.
Ya cansado y con mucho dolor de pies me doy tregua y la dejo para otro día.

Sin llegar a la noche apuramos bastante el día. El lugar nos ha dejado buenas sensaciones, muy recomendable, y es más que posible que regresemos.

OBSERVACIONES.-

Las habituales de cualquier lugar natural de interés público.

¡No tiréis basura como ésta.!

- No tengáis comportamientos irresponsables con la población local. Cuesta muchos años ganarse su respeto y sólo un estúpido instante para perderlo.
- Ser respetuosos con el entorno, estructuras y animales y aparcar en los lugares establecidos sin entorpecer el paso de vehículos.
- Limpiar de magnesio las vías una vez probadas. No clecas y si os da por hacerlas borrarlas luego. No gustan a todo el mundo y no es deportivo.
- Respetar la arquitectura que delimita la zona, marcas, hitos, senderos,...
- No maltratar ni romper las plantas, ni molestar la fauna local.
- Hacer las necesidades corporales en lugares discretos, enterrando la mierda luego. Así mismo la de los perros.
- Recoger la basura (esparadrapo y colillas incluidas) y depositarla en el contenedor más cercano. Las pieles de naranja son biodegradables, pero en gran cantidad son desagradables a la vista y les cuesta desaparecer.
- No encender fuego.

Actualización, basada en la guía Escalades al Ripollès, sobre todo del subsectpor derecha

miércoles, 4 de marzo de 2015

La Rueda Y El Fuego


Este día, fue el Día de La Rueda, y no por la O.M.S. decidiera dedicar un día del año a conmemorar uno de los inventos que ayudó de forma radical en la evolución de la humanidad.
Debían regalar algo, o ser la festividad de cualquier santo, porque todo bicho viviente que tiene un vehículo a ruedas se ve que decidió sacarlo a pasear ese día. Es posible que fuera algo de eso, pero como para según que cosas vivo en la inopia, ni me entero.
Desde mi casa al primer punto de encuentro observé muchos ciclistas, no era anormal, pero era extraño que algún grupo de ellos fuera escoltado por la Guardia Urbana. Ya con Juan Carlos y Peter nos dirigimos a Vilanova i La Geltrú a recoger a Mauro en la estación de tren, vía costas del Garraf.
Es posible que lo que ese día se celebrara fuera el Día Mundial del Cicloturismo al Macizo del Garraf, pues no acabábamos de adelantar a un grupo de ciclistas cuando en apenas 200 metros ya teníamos otro. Así hasta Sitges. Una actividad ciclista muy alta para ser las 10 de la mañana.
Con Mauro ya estuvimos al completo y nos dirigimos a La Talaia, donde la situación fue el acabose y el no va más.



Fuimos acompañados durante toda nuestra jornada de escalada con un variado surtido y muestrario de todo tipo de vehículos. No pasaban ni tres minutos sin que nuestra escalada fuera amenizada por el ruido del motor de algún tipo de vehículo rodado. A los ya conocidos ciclistas se unieron los motoristas, tanto en solitario como en grupo y cabalgando motos de todas las cilindradas. A estos, sin duda de forma solidaria, se añadieron los turismos, y, de forma que se cae la baba, unos cuantos Porsche, Ferrari y hasta un McLaren, que hicieron de esa carretera su pista de preprueba. De preprueba pues se ve que hay un circuito en las proximidades donde los conductores de este tipo de vehículos acuden a pasarlo en grande.
Unos circulaban de forma prudente al vernos, otros apuraban, y unos pocos apuraron mucho más.
No, autocares no pasaron. Tampoco tractores.



Este “muro de sonido” no fue la única actividad que nos acompañó en este día; también tuvimos nuestra sesión de efectos ambientales. El Fuego, ese otro gran invento de la humanidad, igual o más trascendente que la rueda decidió que el día no podía ser perfecto sin él, y decidió autoinvitarse.
Yo siempre había venido a escalar a La Talaia en verano, aprovechando la sombra de la mañana, y en plan matinal, hasta las 14 h (+/-). Nunca había venido en invierno. El día se levantó tal y como la previsión atmosférica anunciaba y puede que algo más: tapado y con algún punto de lluvia.
Y durante las primeras horas escalamos bajo la cobertura de las nubes y con una temperatura muy buena. El tacto era algo húmedo al principio pero mejoró hasta un buen grip.
Como estaba previsto se despejo a partir del mediodía.
El sol llega a La Talaia sobre las 13-14 h. Su llegada supuso un cambio drástico. Cayó a plomo, de pronto nos sentimos como esos galos a los que el cielo ha caído sobre sus cabezas. El calor nos dejó groguis, quien no quedó aplatanado, se fue a echar a la sombra y quien estaba fuerte se quedó hecho una piltrafilla y vacío de fuerza. Lo que eran agarres pequeños pero serios o romos pero generosos se volvieron patinosos de pronto.

Todo esto para decir que el día no estuvo nada mal. Escalamos líneas o guapas o interesantes o las dos cosas, y que nos dejaron con ganas de volver, a pesar de “los inconvenientes”

> The Longest Line,6a+.
Mientras Peter y Juan Carlos empezaban calentado en Filemón nosotros nos fuimos a esta línea que está en el extremo derecho, por un lado no nos molestábamos y por otro prefería hacer esta línea pues no la tenía hecha.
Es un buen 6a+ bastante mantenido y de esos que es difícil que sean algo menos.
La línea está equipada con químicos excepto en una zona en que han añadido un parabolt pues la roca en ese lugar no es de esas que inspira mucha confianza, y el aleje era de esos que mejor no tener mala suerte.

Juan Carlos en Filemón, 6a+

Continuamos calentado en una de las mejores vías de esta zona, en su grado, la Airways.
Un 6b todo continuidad. La entrada algo puñetera pero luego divertida, variada, disfrutona,...

Peter en Airways

Continuamos aumentando las apuestas.
Juan Carlos, todo motivado y bien aconsejado (por supuesto), opta por asediar Siscosis, un duro 7a de tres químicos y reunión. En su primer pegue, tras mucho trabajo, consigue sacarle todos los movimientos.
Mauro decide probarse en Dafnis, que se le rebotó, y yo con un 6b+ que también se encuentra a la derecha del todo y del que no tengo recuerdo de haberlo probado nunca.

Juan Carlos en Siscosis

Juan Carlos en Siscosis

> Más Difícil Todavía, 6b+.
La mejor opción para trabajarse este trazado es olvidarse del recorrido que sale marcado en la guía, el cual te hace candidato a llevarte una buena nata, y jugar con la lógica de la seguridad y de siempre lo más sencillo.
El trazado cumple. Una entrada técnica te deja en terreno de nadie, que es donde hay que ser creativo, para luego atacar un repecho de movimientos atléticos armado con buenos agarres.
En el terreno de nadie, dada la ausencia de seguros entre la entrada y el inicio del repecho, la dudosa calidad de la roca y la presencia de mucha tierra en la repisa de salida, opté por ir todo a mi izquierda, en busca del seguro de la Nina Lasciva, subir al repecho sorteando ese seguro moviéndome más a la izquierda, para una vez teniendo encaminada la repisa, recorrerla toda a la derecha hasta el seguro que toca.

Peter en Más Difícil Todavía

Idem

Mauro se enfrentó a Sostres. El 7a/a+ que brilla con luz propia en este sector. Una de esas vías que en su día había que tener en la libreta, como la Eric de Les Paparres, o la Neska Polyta en Mala Dona, para entendernos.
Una dinámica y espectacular entrada para luego trabajar la continuidad sobre buen agarre con movimientos y posturas variadas hasta la reunión, sorteando, como su nombre indica, un par de minitechos.
A día de hoy, aunque marmolizada, sigue siendo una gran vía. Es que no es sólo una línea de paso obligado, es que los del lugar calientan en ella (incluso descalzos), o le hacen series. La intensidad de paso que ha tenido que soportar esta vía se ha ido cobrando su precio, de ahí que a día de hoy , considerarla de 7a+ puede que sea la mejor opción.

Mauro en Sostres

Idem

Llegamos finalmente al reto del día, para llevarle la contra al aplatamiento en que nos encontrábamos. La El Este Del Oeste, pero como mientras la montaba vi que el paso a bloque era realmente burro cambiamos de proyecto y acabé montando El Último Mohicano (7a+ orientado de 7b).
No tenía referencias de este problema, me sorprendió y es verdaderamente notable. Tiene una sección difícil, a bloque, en su zona central, que según la aptitud se puede trabajar tanto por la izquierda (como Mauro) como por la derecha (el resto) incrustrada entre una escalada de continuidad bastante asequible hasta llegar al paso y que después te tienes que trabajar hasta llegar a la reunión.
Mauro encadenó medio a vista (pues no teníamos referencia de la sección a bloque), medio al flash. Juan Carlos no pudo con el paso duro (Siscosis lo había dejado bien seco y el calor hacía patinar alguna regletilla clave) y yo tampoco pude con él, aunque tengo el método para sacarlo por la derecha.
Buena vía que me queda pendiente para otro día, pero con menos calor.

Mauro en El Último Mohicano

Un día bien aprovechado, he escalado vías que aún no había tocado y me ha quedado una buena vía, no sé si encadenable o no a la hora de la realidad, para otra ocasión. Regresamos a una hora prudente y no era aún de noche al llegar a Barcelona.