Jordan Romero

Mientras la comunidad escaladora-montañera asiste en estos al duelo femenino de quien se lleva los primeros 14 ochomiles, y de paso a su dramático descenso del Annapurna, que si Edurne o Miss Oh. Y parece que han caído del lado de Miss Oh, hasta que se resuelva una reclamación sobre si hizo cima o no en unos de los ochomiles del planeta. Aunque la verdad, dicho sea de paso, eso de hacer ochomiles a base de un equipo que te prepara la ascensión a base de cuerdas fijas y te abre camino lo encuentro poco meritorio, ya que si en lo único que nos hemos de fijar es en si llegas o no la cima y no en como llegas, lo mejor es apaga, vámonos y vivamos estas "gestas" con las más absoluta indiferencia; y mejor fijémonos en escaladas de curro y compromiso aunque no subas un ochomil.

Edurne en la cima del Annapurna - 2.010

Y mientras esas dos mujeres estan liadas y revueltas y tenemos que escuchar la súplica de "¡Por mis hijos, bajadme de aquí!" que tiñen de negro la última ascensión al Annapurna, por estas fechas otros tienen otros objetivos y guerras privadas, por ejemplo Jordan Romero, de 13 años, que quiere ser la persona más joven en subir el Everest.

Este joven de rubio pelo rizado nace en 1996 en Big Bear, un pueblo montañoso al sur de California, a unos 100 km de Los Ángeles.
Empèzó escalando los picos locales, hasta que el mundo local se le hizo pequeño.
A los nueve años de edad, Jordan se inspiró en un mural de la escuela de las Siete Cumbres

Las Siete Cumbres de Dick Bass

Y le dijo a su padre que quería ir a por ello. Jordan Romero se ha propuesto subir a las cumbres más altas de cada continente; y si el tiempo y la oportunidad no se lo impiden, a los 13 años alcanzara la cima del Everest, los 8850 metros de altura.

Sus padres no son un impedimento. Paul Romero, 40 años, un paramédico y corredor de aventura, junto con su compañera, Karen Lundgren, 44 años, una profesora aficionada al alpinismo, están siendo los entrenadores perfecto para hacer realidad el sueño de Jordan. No sólo le sufragan los gastos de sus expediciones, sino que le acompañan y las documentan.
Según su padre, Paul Romero: ”Ésta es su misión. Él marca los tiempos y nosotros sólo le ayudamos con las bolsas y le seguimos por todo el mundo. Es bastante divertido”.

Cuando Jordan tenía diez años, en el 2006, él y su gente subió el Kilimanjaro (África).
En el 2007 alcanzó la cima del Monte Kosciuszko de Australia (De 2.228 mt, en el Parque Nacional de Kosciuszko, es la montaña más alta de la Australia continental), del Monte Elbrus (5.642 mt) en el Cáucaso ruso y además le quedó tiempo para convertirse en la persona más joven del mundo en subir el Aconcagua, en Argentina, con 11 años.

Jordan Romero en el Mt Elbrus

En el 2008, a punto de cumplir los 12 años (11 años y 11 meses), corona el punto más elevado de Estado Unidos (Alaska), el Monte McKinley (6.194 mt, Denali en lengua atabascana).
En el 2009 llega a la cima la pirámide Casrtenz (4.884 mt, El Monte Jaya o Puncak Jaya en indonesio), en Papúa Nueva Guinea.

En la cima del Mt Denali o McKinley

A Jordan y a su equipo les costará cerca de $ 40.000 escalar el Everest (8.850 mt) , y el Everest es sólo una parte de su objetivo. Si Jordan puede escalar el Everest y el Macizo Vinson (4.897 mt) de la Antártida, se convertirá en la persona más joven han subido las Siete Cumbres, los puntos más altos de cada continente. Poca gente lo ha conseguido antes de los 30 años.

Este joven californiano, que cumple con las necesidades comunicativas de la era actual colgando metódicamente sus andanzas en su página web, además de los seguidores que tiene en Twiter y en Facebook; se encuentra desde primeros de abril en Nepal preparándose para subir al Everest. Si lo logra será la persona más joven en lograrlo, después de que el sherpa Temba Tsheri lo lograra a los 16 años.

“He estado esperando este momento durante mucho tiempo y, por fin, va a suceder. No te puedes imaginar lo que siento ahora mismo, aunque es sólo una meta”.
“Si no tengo éxito, estará bien. Lo intentaré de nuevo”.
“Es algo que siempre tuve ganas de hacer antes de morir. La única diferencia es que lo estoy haciendo a esta edad y será un récord mundial. Lo único que deseo es llegar hasta la cima.”

A pesar de los pesares y como ha de cumplior con las obligaciones propias de la edad, su madre, Leigh Ann Drake confirma que Jordan se lleva los libros de “álgebra y unos cuantos deberes”.

Basado en el relato de P. Scarpellini, para El Mundo.es. Sección El Zoo del siglo XXI.